Puente 163 (diciembre 2016)
La Señora Diana Krenn ocupa desde hace un año el puesto de jefe de estudios del Instituto Cervantes de Bruselas. Ha llegado, pues, el momento de hacer un primer balance… Pero antes de eso, hace falta conocerla mejor.
Diana es licenciada en Ciencias de la Información por la universidad de Barcelona, pero tras un encuentro con Lourdes Miquel, se interesó por la didáctica de ELE. Se fue a Roma, donde trabajó en la oficina de la ONU, dedicándose al diseño de material didáctico. Obtuvo también un lectorado en la Universidad de la Sapienza.
Pasados 10 años, empezó a trabajar para el Instituto Cervantes, primero en Marruecos, en donde dio clases durante 7 años y donde publicó material didáctico.
Se trasladó después a Bucarest, ocupando allí el puesto de jefe de estudios, para posteriormente volver, durante 5 años, a Roma, más tarde a Paris (5 años también) y, por fin, llegar a Bruselas.
El papel de jefe de estudios depende de los centros. Hay centros mejor dotados que otros en personal en los que, por tanto, se puede dedicar más tiempo a la formación del profesorado. En Bruselas, la llegada de Diana coincidió más o menos con la mudanza del Instituto a la Avenida Louise. Fue una oportunidad para ampliar la oferta de cursos y preparar nuevas propuestas.
Cuando hablamos de la repercusión de la mudanza, Diana se alegra de que más de 100 alumnos les hayan seguido y de que hayan llegado alumnos nuevos. Se observa, por ejemplo, un aumento del 156% del alumnado A1. En cambio, se entristece un poco al reconocer que ya no hay espacios para eventos como en los antiguos locales (exposiciones, conferencias,…). No obstante, el cambio es positivo y todo el mundo está satisfecho. El edificio es más cómodo, moderno, agradable, luminoso, práctico.
La oferta del centro es un poco diferente. Se proponen 2 cuatrimestres y 3 trimestres, lo que permite mantener la matrícula siempre abierta y ofrece más flexibilidad. Existe también una propuesta de cursos intensivos de 2 o 3 semanas y una nueva franja horaria de clases entre las 13h00 y las 16h00.
La nueva situación, más céntrica, del Instituto Cervantes es una oportunidad para evaluar los contactos con la sociedad belga y para estrechar vínculos. El encuentro con la SBPE forma parte de esta nueva política de apertura, de la que, por supuesto, nos alegramos.
Queremos darle las gracias a la Señora Krenn por el tiempo que nos ha dedicado, por la visita guiada al nuevo centro y sobre todo por su sinceridad y su simpatía.
Esperamos que sea posible seguir creando enlaces fuertes entre la SBPE y el Instituto Cervantes.
V. Vernimmen